La edición 44 del Festival Internacional de Cine de Toronto trajo de vuelta con bombo y platillo a Judy Garland, uno de los máximos íconos en la historia cinematográfica, con su biopic: Judy, protagonizado por la ganadora del Oscar, Renée Zellweger, quien con este papel regresa por la puerta grande a los certámenes fílmicos y, para su fortuna, el filme está teniendo buen recibimiento y dará inicio a una larga campaña de promoción para que la actriz obtenga nominaciones en las diversas ceremonias por su actuación.
El largometraje más que contar la vida de la actriz y cantante se centra en su etapa final (1968), mientras se prepara para su última gira y en el inter conoce a Mickey Dean (Finn Wittrock), su marido. El foco de atención es Renéé Zelweger, a quien catalogan como la más impactante interpretación dramática en su carrera y ella buscó darle una nueva perspectiva a su papel:
Traté de intelectualizarlo en lugar de mirar desde un lugar emocional porque creo que habría sido un poco... desalentador,” declaró a Variety. “Así que simplemente desglosé en términos de estilo y tono, dónde estaba su registro en este momento en particular, el daño y todo eso.
La película toca momentos interesantes como el rodaje de El Mago de Oz (en la que Garland participó) y cómo ser la protagonista de uno de los filmes más emblemáticos en la historia fue el declive de la actriz. Esto aparte de inquietante suena fascinante y resulta uno de los mayores halagos al filme, pero más que al guion, se lo adjudican a Renée por su compromiso para interpretar y no para imitar a Garland.
"Había una sensación tan palpable de soledad con Judy,” menciona el actor Finn Wittrock en una entrevista para Vulture, “esa sensación de que ella le dio más a la vida de lo que le devolvió, de estar agotada y cansada del mundo, lo que, en mi observación, no es algo que Renée tenga naturalmente.”
A todo esto, no hay que olvidar los paralelismos entre las carreras y vida de personal de ambas actrices. Renée también ha estado en el ojo del huracán por un largo tiempo; tras haber ganado el Oscar como Mejor actriz de reparto por Cold Mountain, empezó a tomar decisiones cuestionables respecto a sus proyectos, los cuales pasaron sin pena ni gloria y tras seis años de ausencia de los reflectores y un cambio gradual en su rostro debido al botox. Judy aún no tiene fecha de estreno para México.