No muchos están contentos con la noticia de que Spider-Man ya no será parte de las películas de Marvel, después de que Disney y Sony no lograron llegar a una renegociación económica para dividirse las ganancias del personaje. Por supuesto, esto implica que Kevin Feige no producirá las siguientes dos películas del arácnido, en las que Tom Holland ya estaba comprometido.
Obviamente, desde ayer Twitter está saturado de reclamos, quejas y amenazas por parte de los fans, lo que ha ocasionado consecuencias. Tras el anuncio, las acciones de Sony se desplomaron en la bolsa y seguramente seguirán cayendo desde que los hashtags: #BoycottSony y #SaveSpiderMan, son la principal tendencia en la red social y con los cuales los fans se están uniendo al llamado de boicotear cualquier producción de Sony. En México la tendencia se ha traducido como #SpidermanSeQuedaEnCasa y las reacciones también son multitudinarias:
La compañía está haciendo lo posible para revertir las reacciones y ayer emitió un comunicado tratando de suavizar la situación: “Muchas de las noticias de hoy han malinterpretado la discusión en torno a la participación de Kevin Feige en la franquicia. Estamos muy desilusionados, pero respetamos que Disney haya decidido no permitir que continue siendo el productor de nuestras siguientes dos películas de Spider-Man. Esperamos que esto pueda cambiar, pero también entendemos que las nuevas responsabilidades que Disney le ha dado no le dejen tiempo para trabajar en franquicias que no le pertenecen al estudio. Kevin es genial y estamos muy agradecidos por su ayuda y guía, apreciamos el camino en el que nos puso y planeamos seguir en él.”
A pesar de que claramente Sony ha intentado señalar entre líneas a Disney como el responsable, los fans continúan amotinándose contra ella en las redes sociales. La amenaza es grave y si las acciones de la compañía siguen cayendo y efectivamente el público boicotea sus productos, no le va a quedar más remedio que sentarse a renegociar y ahora con una clara desventaja. Varias fuentes afirman que el anuncio de la separación fue prematura y que Disney y Sony aún están en negociaciones… ¿Les creeremos?