La ciudad de Guadalajara sigue engalanada por la impresionante exposición de Guillermo del Toro: “En casa con mis monstruos” (échale un vistazo en este link). Desde su apertura el pasado mayo se ha convertido en una de las visitas obligadas en la perla tapatía. Gente de muchos lugares de la República Mexicana y del mundo han podido entrar en la mente de uno de los talentos más particulares y valiosos de nuestro país dentro de la industria cinematográfica.
Por casi dos horas los asistentes han podido apreciar los recuerdos, la infancia y los miedos de del Toro de manera única y entrañable. A la par de la exposición en la sala Cine Foro de la Cineteca de Guadalajara hay una retrospectiva del director y se puede ver desde Cronos, Hellboy, El espinazo del diablo hasta El laberinto del Fauno. Un homenaje digno a un cineasta que ha sido congruente con su discurso y que con cada una de sus películas sigue siendo leal al universo que ha creado con un nivel de detalle impresionante, pero sobre todo con amor.
El éxtasis en los tapatíos por la exposición se encontraba a tope y fue gracias a un usuario de Twitter que un día le recomendó a Guillermo que un concierto con la música de todas sus películas podría hacer un juego perfecto con las actividades de “En casa con mis monstruos”. El director le tomó la palabra y no tardó mucho para que las cosas se alinearan.
Hoy se llevaron a cabo dos funciones con la Orquesta Filarmónica de Jalisco en el Auditorio Telmex de la ciudad de Guadalajara. Ambas fueron gratuitas a petición del director. Estuvimos presentes y atestiguamos como miles de tapatíos se dieron cita en el recinto para presenciar uno de los conciertos más increíbles y enigmáticos que se tenga memoria.
La Orquesta estuvo dirigida por Tim Davies, uno de los directores musicales más prolíficos de Hollywood. Ha trabajado en películas como La La Land, Frozen, Ant-Man y en la serie para Netflix en mancuerna con del Toro: Trollhunters: Tales of Arcadia. El realizador mexicano estuvo presente en ambas funciones y dijo unas palabras antes de iniciar el programa, haciendo énfasis en que la música es el alma de una película y es lo que hace hablar a las historias:
Me hubiera gustado una partitura de todas mis películas como ‘Titanes del pacífico’, pero por cuestiones de derechos y de tiempo, no se pudo.
El programa inició con partituras de Trollhunters: Tales of Arcadia, siguiendo con El espinazo del diablo, La forma del agua y terminando con el maravilloso score de El laberinto del Fauno. No estuvieron todas, pero el auditorio se volcó en aplausos por tan atinado y vibrante concierto. La exposición de “En casa con mis monstruos” concluye el próximo octubre en el Museo de la Universidad de Guadalajara. ¡Corran a verla!