La tercera temporada de Stranger Things se estrenó hace unas horas, generando tremenda emoción entre los usuarios de Netflix. La producción ha traspasado la línea tan delgada que existe entre el cine y la televisión. Es decir, podríamos considerar que estamos viendo una de las franquicias de fantasía más largas de la historia.
Y es que tenemos de todo en esta serie: personajes entrañables, misterios sin resolver, cultura popular por doquier y monstruos míticos inimaginables; estos últimos han despertado de nuestras pesadillas más ocultas que tuvimos de niños. Pero ¿qué tanto sabemos de la mayor amenaza de esta temporada? Nos referimos al misterioso Desuellamentes (Mind Flayer).
Estas criaturas son básicamente mitos. Su característica física principal son los tentáculos y la cabeza es más grande que de la de un humano. Viven en cuevas, inframundos, grutas, mundos paralelos oscuros. Se dice que pasean por las noches en los bosques y que el agua es vital para su sobrevivencia. Son asexuales y capaces de producir su descendencia ellos mismos.
Se dice que viven hasta 125 años y que tienen poderes mentales como la telepatía, levitación, telequinesis (por eso Eleven [Millie Bobby Brown] es una de sus mayores enemigas en la serie) y es uno de sus recursos para comunicarse con los demás de su especie, además de ser su manera de atacar y defenderse. La inteligencia de estos seres no tiene límites y es por ello los mortales se encontrarían en franca desventaja al encontrarse con ellos.
Originalmente en la primera temporada se les bautizó como “Shadow Monsters” y después recibieron el nombre de Desuellamentes en español. Según los creadores, la mayor inspiración que tuvieron al crear al máximo villano de esta serie fue Steven Spielberg. El motor de su idea fue Tiburón. Querían provocar esa misma sensación de algo que no pudiera verse en su totalidad y que los protagonistas tampoco tuvieran la certeza de qué se trataba, pero el miedo que generara tan sólo saber de su existencia bastara… Lo lograron.
Matt Duffer -cocreador de la serie- también se inspiró en el manual de monstruos del juego Dungeons and Dragons. Lo que más llamó su atención fue la criatura conocida como The Mind Flayer. De la misma manera tomó ideas de ese material para los Demogorgons y Demodogs. Ninguno de estos tres se parece a sus versiones originales, pero fueron base para diseñarlos y crearlos manteniendo la esencia. En la primera temporada recordemos que sólo existía un Demogorgon y en la segunda fueron más. Quizá responden todos estos al Desuellamentes o pudiera ser que exista más de uno.
Al finalizar la segunda temporada uno gigante cubre la escuela de Hawkins con todo, menos buenas intenciones. Ahora por fin descubriremos qué conexión tendrá con Eleven o con Billy (Drake Montgomery). Incluso si son parte de algún proyecto del gobierno. Todos los episodios de la tercera temporada de Stranger Things se encuentran en Netflix.