Sensualidad, fama, talento frente a la cámara, son algunas características de Natalie Portman, quien antes de aceptar el papel de Jane Foster estaba contemplada para ser Natasha Romanoff. Seguramente no lamenta la decisión, ya que recordemos su partida del MCU se debió a diferencias creativas, por lo que teniendo a un personaje más participativo hubieran salido chispas desde antes. Además, el que no haya sido la elegida para el papel le abrió las puertas para protagonizar ‘El cisne negro’, que a la postre le dio un Oscar.
Entre las opciones se encontraban talentos de la talla de Emily Blunt y Angelina Jolie.