Ayer se estrenó el segundo tráiler del spinoff: 'Rapidos y furiosos': Hobbs & Shaw', que además de darnos más luz sobre la trama de la película (que nos tenía bastante confundidos) nos sorprendió con la aparición, bastante prolongada, de Eiza González, quien -en el extraño caso de que no lo recuerden- literalmente deslumbró a Hollywood con un vestido amarillo 'friégame la retina' en la alfombra roja de los premios de la Academia de 2018, para después convertirse, al lado de Eugenio Derbez, en una de las pocas mexicanas que han entregado un Oscar.
Pocos lo saben, pero Eiza González no es ninguna advenediza que un día apareció debajo de una piedra y que de repente ya suma 11 proyectos en Hollywood. Eiza es hija de Glenda Reyna, la fundadora de una de las primeras agencias de modelos en México y quien es responsable de las carreras de top models mexicanas como Eugenia Cauduro, Heidi Balvanera, Celina del Villar, Dinorah Cetina y Elsa Benítez, entre otras.
Nadie como Reyna para saber cuáles eran los pasos necesarios para llevar a su hija a lo más alto del estrellato. Para empezar, la actriz estudió en el Colegio Edron, y desde ahí que su inglés es perfecto. En su adolescencia estudió actuación con Patricia Reyes Spíndola y en el CEA de Televisa. Su primera aparición en la pantalla chica fue en el 2006 en la telenovela, 'Lola, érase una vez'.
A Hollywood llegó en el 2015 con el papel de Sheila 'Jetta' Burns en 'Jem y los holográmas', pero el salto a la fama fue gracias a la versión para televisión de 'From Dusk Till Dawn: The series' en el papel de Satanico Pandemonium, el mismo que hizo mundialmente famosa a Salma Hayek en 'Del crepúsculo al amanecer', la cinta de 1996 de Robert Rodriguez.
Así llegó su papel como Darling en 'Baby: el aprendíz del crímen' en 2017, y desde entonces el romance entre Hollywood y Eiza no ha hecho más que crecer. A lo largo de 2018, González fue incluída en varios proyectos, empezando por su participación en 'Bienvenidos a Marwen' de Robert Zemeckis y en la que compartó créditos con Steve Carell. También apareció en 'Battle Angel: la última guerrera' de Robert Rodríguez, en donde interpretó al personaje de Nyssiana. En 'Paradise Hills', que se estrenó en enero en Estados Unidos, interpreta a una ruda paciente del manicomio a donde llevan al personajes de Emma Roberts para que le lavan el cerebro y destruyan su voluntad. Enero también la vio en 'She's Missing', cinta que coprotagoniza con Lucy Fry sobre una mujer que desaparece en un rodeo. Apenas a finales de noviembre de 2018 se anunció que Eiza tendría un corto papel en 'Hobbs and Shaw' como Madame M, personaje del que no se ha revelado nada, pero que a juzgar por el tráiler no es tan pequeño como se había dicho en un principio.
La mexicana tuvo que organizar la agenda para participar en esta cinta, ya que desde entonces se encuentra filmando 'Godzilla 2: rey de los monstruos', en la que actuará al lado de Alexander Skarsgard y Millie Bobby Brown. Por si fuera poco, otros dos proyectos de Eiza se encuentran actualmente en post producción: 'Bloodshot' al lado de Vin Diesel y 'Cut Throat City', un filme cuya trama gira en torno a la tragedia que dejó el huracán Katrina y en la que es la protagonista. La actríz mexicana ya ha sido confirmada para otras dos películas que actualmente esta en preproducción: 'Waldo' un thriller con Mel Gibson y Charlie Hunnam, y la secula de 'Kung Fury'.
Para rematar, González afirmó en entrevista con El Universal, que conoció a Steven Spielberg en los Oscar y todo apunta a que será parte del elenco del remake de 'Amor sin barreras'. Con tanta actividad y una popularidad de la que ninguna actriz mexicana había disfrutado jamás, es obvio que Vogue la nombró como una de las 14 súper estrellas internacionales. Sin duda, le guste a quien le guste, ya lo es.