En los libros, el Trono de hierro es una estructura gigante, hecha a partir de miles de espadas, que incluso necesita de escaleras para poder subirse. Esto no servía para los propósitos de la serie, así que los productores decidieron crear una versión propia que fuera un poco más realista.
Con todo, los encargados de hacer los 'props' para 'Game of Thrones' decidieron que no era justo que una pieza tan importante para la historia (finalmente todos se están peleando por ocuparlo), fuera un simple silla hecha de espadas, así que decidieron utilizar moldes que hubieran sido utilizados en otras producciones épicas. Si tuviéramos la oportunidad de verlo de cerca, descubriríamos que el Trono de hierro oculta muchos easter eggs, como la espada de Gandalf (Ian McKellen) en 'El señor de los anillos', la que usó Kevin Costner en 'Robin Hood: príncipe de los ladrones' y la de Orlando Bloom en 'Cruzada'.