A Quiet Place y Bird Box, estrenadas con meses de diferencia este 2018, comparten similitudes importantes, como el hecho de que ambas protagonistas femeninas -Emily Blunt y Sandra Bullock- pasaran por un embarazo en pleno apocalipsis. Mientras que en la primera ficción, los protagonistas no podían emitir sonido alguno con tal de sobrevivir, en la segunda nadie puede ver en exteriores, lo cual hace todo bastante más difícil. De pronto, incluso hay una secuencia de escape con niños y voluminosas mochilas, que nos recordó mucho a lo visto en Un lugar en silencio, cuyo guión orginal sólo contenía un diálogo. En defensa de Bird Box, debemos decir que la historia proviene de la novela homónima del 2014, escrita por Josh Malerman.
El reciente estreno de Netflix, a cargo de Sandra Bullock, es un muy buen thriller, pero sus fallas son el tema del momento...