Malorie (Sandra Bullock), lleva todo el peso de la trama desde las primeras escenas, en las cuales su conflicto con la maternidad permea en toda la historia (sumado al hecho de tener qué sobrevivir, claro está). Las inesperadas decisiones de Malorie, nos van a causar sentimientos encontrados. Pero lejos de tener el rol de bruja paranóica todo el tiempo, también la veremos ejerciendo momentos precisos de humor negro junto al personaje de Sarah Paulson, lo cual nos encanta.
El reciente estreno de Netflix, a cargo de Sandra Bullock, es un muy buen thriller, pero sus fallas son el tema del momento...