Anoche Marina de Tavira y Yalitza Aparicio fueron entrevistadas por Jimmy Kimmel para hablar de Roma, que para bien o para mal, se ha convertido en el tema nacional por excelencia, y fanáticos y detractores se agarran hasta con la cubeta en las redes sociales defendiéndola o atacándola. Pero el furor no es sólo en México: TODO el mundo quiere entrevistar a Cuarón y a las protagonistas, en particular a Yalitza que se ha convertido en todo un icono después de ser la portada de Vogue. Como la actriz no habla inglés, Kimmel le pidió a Guillermo, su side-kick de origen mexicano, que sirviera de traductor... aunque también se notó que la intención era recordarle a la audiencia su postura liberal y pro migrante, quizá en caso de que metiera la pata... y así fue.
Como pueden ver en el video al final de la nota, la entrevista no reveló nada nuevo. Aparicio contó una vez más -pobre, ya debe estar harta- el proceso de casting y de qué no tenía idea quién era Alfonso Cuarón. Y a partir de ahí Kimmel resbaló. Primero preguntó que si conocía la película donde Sandra Bullock mata a George Clooney... pero le pidió a Guillermo que no la tradujera, lo que interpretamos como que Kimmel obvió la respuesta y dio por hecho (casi, casi) que porque Yalitza no sabía quién era Cuarón nunca había visto una película. Pero lo peor vino justo después, cuando le preguntó que si sabía lo que era Netflix...
Hasta la actriz se sacó de onda. Entendemos que en la poca cultura que los gringos tienen sobre otros países, Kimmel crea que Yalitza vivía debajo de una piedra, pero siendo afintrión de uno de los Talk Shows más importantes de Estados Unidos y como líder de opinión en un país TAN obsesionado por lo políticamente correcto, que condena severamente los comentarios racistas e incluso censura palabras, y cuya audiencia exige que los protagonistas sean hasta de la orienteación sexual y religión del personaje que encarnan (como le paso a Scarlett Johansson y a Ruby Rose con Batwoman), Kimmel debió haber investigado o por lo menos haber sido mucho más sensible en la forma en qué lo preguntó, porque a todas luces dio por sentado que Yalitza no tiene idea de la vida moderna por ser una mujer indígena oaxaqueña.
Al final, Jimmy le preguntó al par de actrices que si estarían disponibles para conducir el Óscar, y quiero pensar que la respuésta de Yalitza tuvo malicia y revire: "Sí claro, y en español". Si Trump lo escuchó anoche, debe haber amanecido con diarrea.