Los años 70 en la Ciudad de México se rodaron en locaciones reales como la esquina de Laredo y avenida México, frente al Parque México. Ahí, vemos a los niños, la abuelita y a Cleo (Yalitza) corriendo rumbo al cine Las Américas. Como el cine las Américas ya no existe, esta escena de la película fue recreada por Eugenio Caballero, productor de arte.
El cine al que Cleo va a noviar para luego escaparse a la Alameda, es en realidad el Teatro Metropólitan. La mueblería a la que Cleo va de compras es en realidad un gimnasio. El lugar donde entrena el Dr. Zovek es Chimalhuacán, y la playa donde viaja la familia no es Tuxpan, Veracruz... sino Tabasco.