En Animales fantásticos: los crímenes de Grindelwald se dio una revelación que cimbró a todo el Wizarding World, ya que resulta Credence (Ezra Miller) es hermano o medio hermano de Albus Dumbledore (Jude Law), según confiesa Gellert (Johnny Depp) al final de la cinta. Si bien esto afecta de cierta forma a los hechos que conocimos en la saga de Harry Potter, también podríamos estar ante una mentira del villano, pero no del tipo en la que se inventa la historia, tal vez no dijo la verdad sobre el parentesco del obscurial.
De acuerdo con una teoría desarrollada por Screen Rant, Credence – ahora conocido como Aurelius – es en realidad el hijo de Albus, lo que explicaría muchas cosas del personaje en sí mismo. Primero que nada, resolvería el hoyo en el guion respecto a los padres del obscurial, ya que es algo complicado que los padres de Dumbledore, Percival y Kendra hayan procreado a un cuarto hijo, debido a que ya no estaban juntos en la época en que nació Credence, además de que el padre fue a Azkaban en 1890 donde murió más tarde y la madre falleció en 1899. Si a esto le sumamos que Aurelius nació – según el guion original – en 1901, es inconcebible.
Para el tiempo en que nació Credence, Albus tenía 20 años aproximadamente, lo que lo hace viable la teoría. Dumbledore pudo haber tenido una aventura con alguna chica – lo que entonces resultaría en que es bisexual – pero se negó a cumplir su labor de padre y eso trajo como consecuencia que el niño fuera llevado a tierras estadounidenses. “Un hijo cruelmente desterrado” dice la profecía y también encaja con lo anterior.
Grindelwald es de las pocas personas que supieron de la aventura y por ello sabe del origen de Aurelius, sin embargo, si lo presenta como el hijo de Albus, Credence hubiera querido correr hacia él para buscar respuestas y satisfacer su búsqueda de identidad, por ello Gellert prefirió mentir sobre su parentesco y le hizo creer que es su hermano, para cimentar odio y tener a un aliado poderoso de su lado.
Esto también explicaría porqué Albus es menos violento en el futuro y los cuidados que tiene sobre Harry Potter, ya que quiere compensar de alguna forma el sentimiento de culpa que lo carcome sobre el abandono de su hijo, con quien seguramente se enfrentará en algún momento de Animales fantásticos con resultados mortales para Credence. Suena convincente, pero al final J.K. Rowling tiene la palabra.