Cuando Rami Malek se enteró de que sería protagonista en la biopic de Freddie Mercury, tuvo que hacer todo lo posible por llenar los zapatos de la leyenda del Rock, y uno de sus mayores retos fue parecerse físicamente al cantante de origen africano. Casi un año antes de comenzar el rodaje -y aún sin estar totalmente seguro de si el proyecto se llevaría a cabo-, Malek comenzó a usar la protuberante dentadura postiza que lo haría lucir más similar a Mercury con la intención de acostumbrarse y sentirse cómodo. Los encargados de prostéticos han dicho que 'se hicieron muchos pares de dientes artificiales' antes de encontrar los más convincentes.
Rami Malek dijo a la entrevistadora Ellen DeGeneres que 'fue difícil cantar, hablar, besar con los dientes... Pero le gustó tanto que, al final, casi se sentía desnudo si no los tenía puestos'.