La mayor parte de la cinta puede disfrutarse en el formato tradicional, sin embargo, cuando llega el momento cumbre del aterrizaje lunar, la magia de las cámaras IMAX aparece, ya que se puede apreciar de forma más amplia y detallada todo el trabajo para crear el efecto de la superficie. La toma es más ancha verticalmente y el juego con la iluminación crea un efecto inmersivo. Sin duda este formato es la mejor opción para disfrutar de First Man.
Obviamente el presupuesto no daba para filmar en la luna, pero la forma en que recrearon el espacio exterior es de aplaudirse en esta cinta.