Cuando The X-Files se estrenó en 1993, la agente y doctora del FBI Dana Scully no se parecía a ninguna otra mujer en la televisión: era fuerte, resistente, ferozmente inteligente y trabajaba una carrera que la mayoría de las mujeres no habían visto en pantalla. La idea de que las mujeres se interesen en el campo científico como resultado de Scully se conoce desde hace años como El efecto Scully. Según el Instituto Geena Davis, las mujeres que observaron la serie regularmente tenían un 50% más de probabilidad de dedicarse a la ciencia, tecnología, ingeniería o matemáticas y casi dos tercios de las mujeres encuestadas que trabajan hoy en esas áreas dijeron que Scully fue un modelo a seguir.