Aunque todos nos hemos dado cuenta de que existe una fórmula para realizar trailers -que varía dependiendo del género de la película- hacerlos no es cosa fácil. Para empezar, casi siempre se realiza antes de que termine la edición, por lo que es probable que haya escenas que aparezcan en el avance, pero que ya no lleguen al corte final.
También está la cuestión de cuánto revelas de la trama. Puede que digas tan poco sobre la cinta o quieras ser tan misterioso que no atraigas a tu público, pero igual revelas tanto que la gente ya no le ve el caso de ir a verla.
Como todo material promocional, existe cierto espacio para decir la verdad a medias; como cuando el trailer de una comedia tiene las únicas tres escenas que te van a hacer reír en la película. a nadie le gusta la jugarreta, pero es hasta cierto punto entendible.
Pero lo que no comprendemos son estas seis ocasiones en que Marvel nos ha engañado con escenas que nunca aparecen en la cinta. Juegan con nuestros sentimientos y no se vale, sobre todo porque nos tienen semanas especulando y comparando teorías. No es justo, pero nos encanta...