Jennifer Aniston y Tate Donovan tuvieron que grabar escenas de pareja enamorada en Friends cuando se estaban olvidando, lo cual sí que fue dificil. Ambos se habían comprometido cuando alguien invitó a Donovan como estrella invitada al longevo programa. En la trama, nuestra querida Rachel Green tenía un crush por el inversionista Joshua Burgin, lo que los hizo filmar juntos seis tortuosos episodios. Cuando el actor recibió la oferta de los productores para trabajar en el show, llamó a su ex para consultarla y ella pensó que se trataba de una broma, pero aceptó pensando que les ayudaría a superar la ruptura. Donovan, confirmó posteriormente que el plan había fracasado:
Ser romántico con ella frente a las cámaras fue miserable, fue horrible.
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