Esperábamos que en algún momento estallara la tensión entre el triángulo romántico entre Daenerys, Jorah y Daario, así que nos sentimos igual de sacados de onda qué el cuando, de la noche a la mañana, la madre de dragones lo mandó al cuerno y lo dejó plantado en Meereen. El pobre y guapísimo Daario se quedó como una mera anécdota en la trama, un mero objeto sexual de Daenerys. Bien por ella, pero este personaje no llevó su historia a ningún lugar intrigante.
¿Será posible que una de las mejores historias de los últimos tiempos tenga cabos sueltos o huecos en la trama? Oh si...