El hilo narrativo de Arya uniéndose a los Hombres sin Rostro de Braavos pintaba de lo más prometedor y todos pensábamos que tarde o temprano se entertejería con los de otros personajes. Hasta eso, disfrutamos ver el entrenamiento de la joven Stark para convertirse en asesina. Pero de repente, todo tomó un rumbo demasiado místico y misterioso, y dejamos de entender bien qué era lo que estaba pasando, además, duró más que a cuaresma.
Arya se volvió ciega y parecía que la Waif la molería a palos hasta el final de la serie, pero logró escaparse de la nada. Por lo pronto, no sabemos a qué fue, por qué y para qué se quedó. Parece como si sólo un pretexto para sacar a Arya de la trama en lo que estaba lista para regresar a Westeros. Este hueco es tan grande, que incluso hay una teoría fan que intenta rellenarlo, afirmando que Arya murió en manos de la Waif, y que es ésta la que ocupa el rostro de Arya.