Sabemos que Tom Cruise se toma muy en serio su trabajo y prefiere hacer la mayoría de sus escenas de acción en vez de usar un doble, eso lo ha caracterizado desde siempre. Sin embargo, esto conlleva un riesgo mayor para la producción, como lo ocurrido en Misión: Imposible – Repercusión en la que se rompió un tobillo haciendo una escena y eso paró el rodaje por un tiempo.
En ese momento pudo pensarse que todo el proyecto iba cuesta abajo con la incapacidad de su protagonista por dar su mejor esfuerzo, sin embargo, fue todo lo contrario. Sin planearlo así, la pausa forzada le dio nueva forma a la cinta e inclusive la llevó por un mejor camino. Henry Cavill está de acuerdo con esto y en una entrevista para CinemaBlend reveló que el descanso les cayó de perlas:
No sé cuántos meses fueron, pero todos estábamos hechos polvo en esa etapa. Entonces, cuando sucedió el descanso simplemente dijimos, 'sabes que no es un mal momento para recuperarse y podemos descansar un poco, asegurarnos de que todo sea perfecto y volvemos'. Y lo hicimos. Fue bueno y funcionó realmente a nuestro favor.
Por la declaración nos damos cuenta que las cosas no estaban funcionando a la perfección dentro de la película para el reparto, y si lo sumamos con la reciente revelación del director Christopher McQuarrie, en la que aseguró que el guion no estaba terminado cuando empezaron el rodaje, Misión: Imposible – Repercusión pudo haber tomado un camino espantoso, producto de la exigencia comercial más que de una propuesta cinematográfica.
En este caso la suerte jugó a su favor y el descanso forzoso le dio tiempo al reparto de recuperarse y al cineasta el espacio requerido para cambiar y añadir cosas en el libreto y terminar con lo que puede ser la mejor película de la franquicia de acuerdo con las opiniones de quienes ya la vieron. Mientras esperamos su estreno el próximo 26 de julio, hay que rememorar los momentos más sorprendentes de la saga y comenzar a hacer espacio para los nuevos.