En Nunca estarás a salvo, una de las más recientes cintas de Phoenix, que de hecho se estrenó hace unas cuantas semanas y que le valió el premio a mejor actor en el Festival de Cannes, interpreta a Joe, un aparentemente tranquilo y silencioso personaje que en realidad es un desalmado y explosivo sicario que esconde un sinfín de severos traumas y problemas mentales tras una fachada inmisericorde de frialdad e indiferencia en la que logró poner en pantalla la complejidad de un alma atormentada, llena de dolor emocional que se expresa a través de mucho humor negro. Nada más le faltan los cortes a cada lado de la sonrisa.
Aunque Jared Leto también es un actor de método como él, Phoenix ha demostrado que es capaz de mostrar ese grado de maldad reprimida disfrazada de ironía que lo hará un Joker inolvidable.