El más memorable de los villanos interpretados por Joaquin Phoenix es sin duda la del malvado emperador romano Commodus que le hace la vida de cuadritos a Maximus Decimus Meridious. Inhumano, inclemente, vengativo, hipócrita y traidor, es perverso en todos sentidos. Un hombre sin escrúpulos para quien el poder lo es todo y no le importa los medios a los que tenga que recurrir para deshacerse de sus enemigos. Al igual que el Joker muestra cierta vulnerabilidad emocional que siempre disfraza con ironía, sarcasmo y una personalidad un tanto queer que lo hacen parecer inofensivo.
Aunque Jared Leto también es un actor de método como él, Phoenix ha demostrado que es capaz de mostrar ese grado de maldad reprimida disfrazada de ironía que lo hará un Joker inolvidable.