El actor Demián Bichir ha alzado la voz, o más bien la pluma, para manifestarse abierta y duramente en contra de la más reciente decisión de la administración Trump, que está separando a niños de sus padres ilegales:
En esta vida tenemos la oportunidad de ser héroes o villanos. En las últimas semanas, la administración Trump alcanzó el nivel más bajo de humanidad, al utilizar a niños para darle al mundo una lección.
Fueron algunas de las palabras que escribió el actor mexicano en su artículo para Deadline en el que protesta en contra de la acción gubernamental norteamericana que mantiene a más de 2,300 niños (más de 100 tienen menos de cuatro años), hijos de inmigrantes en almacenes convertidos en centros de detención de la Patrulla Fronteriza norteamericana, desde que en abril pasado el gobierno de Trump lanzó su política migratoria de cero tolerancia, que exige procesar como criminales a todas las personas que ingresaron de forma ilegal en el país, lo que les impide llevarse a los niños que trajeron consigo.
Esta administración ya entro en la categoría de villano y está mostrando su peor cara.
En su texto, Bichir pone de manifiesto las mentiras con las que Trump ha convertido a los inmigrantes latinoamericanos en los ‘malos de la película’ e incluso confiesa que estuvo en la misma situación cuando llegó por primera vez a Nueva York a estudiar actuación: "Estas familias son refugiados, no criminales. Ninguno de los niños enjaulados parecen traficantes de drogas ni violadores. Todos sabemos de lo que está hecho Trump, pero es una degracia que la gente a su alrededor estén vergonzosamente participando de esta agenda inhumana."
Bichir no es el único que ha condenado la situación. Ben Stiller y Reese Whitherspoon se han manifestado en Twitter para presionar a sus legisladores:
Jessica Chastain incluso condena la acción como digna del infierno, mientras que James Gunn aboga porque el problema en la frontera no se va a resolver con un muro ni encerrando niños:
La comunidad artística mexicana no se ha quedado atrás. Edith González llama a una protesta pacífica frente a la embajada estadounidense, mientras que Alfonso Herrera propone llevar el caso a la UN.