Deadpool 2, recaudó más de 166 millones de pesos en su estreno la semana pasada en nuestro país y no es para menos. La segunda entrega del irreverente anti-héroe interpretado por Ryan Reynolds es aún mejor que la primera ya que su trama, además de mostrar las típicas ocurrencias del mercenario enmascarado, es sumamente ingeniosa e impredecible y está llena de cameos y referencias.
Sin duda, el cameo más sorpresivo fue el de Brad Pitt como Vanisher, el invisible superhéroe que se une a la X-Force de Deadpool, y que tristemente muere electrocutado antes de lograr aterrizar en su paracaídas. Su aparición fue tan repentina e inesperada que muchos tardamos unos minutos en darnos cuenta que se trataba del mismísimo ex de Angelina Jolie.
Aunque en algún momento se rumoró que podría interpretar a Cable, el nombre de Pitt no volvió a estar relacionado con Deadpool 2 desde que se anunció que Josh Brolin, el villano favorito de esta temporada de superhéroes, sería el encargado de interpretarlo. Brad Pitt, quien actualmente está involucrado en Once Upon a Time in Hollywood, el nuevo proyecto de Tarantino, es reconocido por ser muy selectivo con sus papeles, pero de acuerdo a IndieWire que fue muy fácil convencer al actor para realizar esta aparición e incluso pidió muy poco a cambio.
En una entrevista con CinemaBlend, los guionistas Rhett Reese y Paul Wernick afirmaron que Brad Pitt aceptó trabajar por el salario básico por día que establece el sindicato de actores, por lo que debe haber recibido menos de 1000 dólares por su participación. Reese comenta que el actor sólo tuvo una exigencia extra: una taza de determinado café de Starbucks que debería serle entregada por Reynolds en el set. Así lo hicieron, pero lo más chistoso es que a Pitt se le había olvidado su petición y no entendía lo que estaba pasando.