Una de las escenas más divertidas fue cuando Wade Wilson mencionó -así como en la primera entrega- que en la mansión de los X-Men sólo viven un par de mutantes Coloso (Stefan Kapicic) y Negasonic Teenage Warhead (Brianna Hildebrand) probablemente por la falta de presupuesto de la cinta.
Pero esta vez sí hubo una respuesta visual, ya que justo cuando lo estaba diciendo se ve en una de las habitaciones a varios de los integrantes de los X-Men en su versión joven planeando algo, entre ellos el Porfesor Charles Xavier (James McAvoy), Quicksilver (Evan Peters) y Bestia (Nicholas Hoult) quien termina por cerrar la puerta para evitar que Deadpool se dé cuenta de su presencia.