Este pequeño en silla de ruedas que sufre parálisis y del síndrome Tourette, está limitado a sólo gritar su nombre cada que aparece en pantalla: “¡Timmy!”, con ello se expresa para prácticamente cualquier situación, ya que varía la intensidad con la que lo dice y se ayuda con sus manos y rostro para hacer señas y gestos para que los demás puedan comprender mejor lo que trata de expresar, aunque principalmente sólo su amigo Jimmy (que también está inválido) entiende lo que dice.
¡Qué no te engañen! Su limitado vocabulario no les impide ser de los más carismáticos en sus respectivas producciones.