La primera no estuvo mal e inclusive dio pie a una secuela, pero fue justo en esta segunda parte cuando Nicholas Cage volvió a interpretar un papel el olvido. La calavera con fuego y con gusto por las motocicletas fue tan ridículamente representando aquí que muchos terminamos por odiar al personaje y por supuesto a Cage.
Esto obviamente fue antes de que Marvel Studios tomara el mando de sus adaptaciones de historietas al cine. Cage ha declarado que el mal resultado fue culpa de los productores, ya que no les permitieron hacer una película clasificación C pese a que el guion ya estaba hecho.