Cómo no recordar la isla de Kalokairi en la que Donna (Meryl Streep) le dio rienda suelta a su diversión (y más que eso) cuando era joven y cuyas consecuencias las vivió años más tarde, justo antes de la boda de su hija Sophie (Amanda Seyfried), quien quería conocer a su padre y en el descubrimiento se encontró con tres posibilidades; todo esto mientras veíamos diversos números musicales pegajosos.
10 años más tarde regresamos al mismo lugar con la diferencia de que Sophie está embarazada y se siente temerosa por ello. Mientras esto ocurre, nos transportamos al pasado, en la época en que Donna era una adolescente y justo en los momentos en los que conoció a sus tres amores: Sam (Pierce Brosnan), Harry (Colin Firth) y Bill (Stellan Skarsgård).
Por supuesto que nos moveremos entre las décadas al ritmo de la música de ABBA, y nuevos intérpretes se unen al elenco para representar la etapa joven de los protagonistas. Lily James (Baby Driver: El aprendiz del crimen) es Donna; Alexa Davies (A Brilliant Young Mind) es Rosie y Jessica Keenan Wynn (La chica del tren) es Tanya. Por el lado masculino están Jeremy Irvine (Caballo de Guerra) como Sam; Josh Dylan (Aliados) como Bill y Hugh Skinner (Los miserables) es Harry.
Mientras el reparto original de Mamma Mia! del 2008 se mantiene intacto con Meryl Streep (El diablo viste a la moda) a la cabeza, seguida de Pierce Brosnan (El implacable), Colin Firth (El discurso del rey), Stellan Skarsgård (Mente indomable), entre otros.
Mamma Mia!: Vamos otra vez llega a las salas el próximo agosto y con ello las ganas de irnos de vacaciones a algún lugar con vista al mar.