Hoy se celebran 20 años de la Batalla de Hogwarts y como ya es tradición, J.K. Rowling ha publicado una disculpa en Twitter por la muerte de alguno de sus personajes. En años anteriores los twitts de la autora británica habían sido no solo obvios, sino hasta necesarios (para ella y para nosotros). La primera vez fue en 2015, cuando pidió perdón por la muerte de Fred Weasley, porque -dijo- era la que más le había dolido:
Al año siguiente, J.K. Rowling se disculpó por haberle dado cuello a Remus Lupin y explicarlo le tomó dos twitts más en los que confesó que había decidido matarlo tras terminar de escribir La orden del fénix y que dado que Arthur (Weasley) había sobrevivido, Lupin tenía que morir:
Lo siento. No disfruté haciéndolo. La única vez que mi editor me ha visto llorar fue por el destino de Teddy.
El año pasado, J.K. Rowling desató una gran controversia cuando dio a conocer quien era el elegido de 2017: Severus Snape: "Ok, aquí está. Por fa vor no empiecen una guerra de flamas por esto, pero este año me gustaría disculparme por haber matado a (en voz baja): Severus Snape."
Este año su elección nos ha dejado con el corazón apachurrado, porque sin duda, la muerte de este personaje nos dolió a todos en el alma y nos dejó berreando, por ser una de las más inesperadas, nobles y desinteresadas de toda la saga:
"Otra vez es ese aniversario. Este año me disculpo por haber matado a alguien que no murió durante la Batalla de Hogwarts, pero que ofreció su vida para salvar a quienes la ganaron. Me refiero, por supuesto, a Dobby, el elfo doméstico."