Ya desde el título podíamos esperar cualquier cosa y si uno no iba con grandes expectativas, y entraba en el juego hiper churrero que proponía esta cinta de 2003 sobre un mano a mano entre Jason y Freddy Kruger, resultaba hasta divertida, aunque no por eso dejó de ser un churro en toda su extensión.
Son 12 y -no se equivoquen- todas son churros... eso fue justamente lo que ha convertido en clásico a esta franquicia del sub-género del 'Slasher' que cambió para siempre a los campamentos junto a un lago...