Muchas veces querer evitar lo clásico y tradicional para dar paso a nuevas ideas no es lo mejor. Algo así les ocurrió a los realizadores de Los cuatro fantásticos (2015), quienes decidieron hacer a un lado los emblemáticos trajes en azul brillante de las historietas y darles algo más sencillo y aburrido a los protagonistas.
Si de por sí la historia es un buen remedio para el insomnio, el tener atuendos austeros y de colores oscuros no hace de la cinta algo más entretenido. Hubo molestia de los fanáticos por esta situación e inclusive Miles Teller salió a comentar que sería ilógico que como grupo que recién se unió tuvieran los trajes que todos conocemos. No parece tan segura su respuesta, pero pues ya qué.