Estamos en una época en la que Hollywood ha abierto su mente y se ha vuelto más incluyente con sus propuestas relacionadas al tema de la discriminación. Desde las películas que llegan a la pantalla grande con el punto de vista de los que antes sólo eran retratados como víctimas (negros, homosexuales, inmigrantes, etc.) hasta las propias ceremonias de premiación, en las que cada vez es mayor la voz de estos grupos.
El año pasado vimos que la audiencia recibió con buenos ojos la cinta Llámame por tu nombre, una historia sobre un joven que se enamora de un adulto durante un verano en Italia en la época de los 80. Pero para este año tenemos una nueva cinta con temática homosexual que tendrá una mayor distribución mundial: Yo soy Simón, un coming of age centrado en Simón Spier (Nick Robinson), quien desde pequeño se da cuenta que le gustan los hombres pero no se ha atrevido a externarlo y decide seguir disimulándolo.
Todo cambia cuando en la red social de la escuela otra persona publica de forma anónima que es gay, situación con la que se identifica el protagonista y comienza a escribirle para compartir sus vivencias. A lo larga de la trama Simón comienza a cambiar su ideología por diferentes situaciones que lo llevan a sufrir en busca de su libertad sexual.
Yo soy Simón ya se estrenó en Estados Unidos y la opinión de los expertos está dividida: unos aman la forma de plasmar el proceso para “salir del clóset” con personajes adolescentes que están influidos no sólo por su familia, sino por sus amigos y círculo social. Mientras otros, aborrecen la forma en que se abordan los personajes, tachándolos de banales y superfluas las circunstancias que rodean a Simón.
Alguien que está a favor de esta cinta es el director y actor canadiense Xavier Dolan, quien incluso dedicó una extensa carta en Instagram a la película donde resaltó lo benéfico de lanzar este tipo de filmes y su identificación con el protagonista:
‘Yo soy Simón’, en toda su seriedad, en toda su normalidad, muestra la lucha de reconocerse gay, pero con una conclusión inspiradora para los adolescentes que verán ‘Yo soy Simón’ porque no se sienten ‘normales’. Quizás esto les enseñe que, incluso si su vida no es tan privilegiada como la de Simón, pueden hacer algo. Si hubiera tenido una película como esta cuando tenía 15 años, tal vez no le habría mentido a mi papá sobre ese póster de Ashton Kutcher que pretendí regalarle a mi prima Stefanie delante de él y que en realidad era mío.
Yo soy Simón llega a México el próximo 13 de abril.