Otra de las cintas aclamadas de Martin Scorsese que no recibió la justicia que merecía. Nominada en las categorías de dirección, actor y actriz de reparto, edición guion adaptado y edición, sólo ganó Joe Pesci por su interpretación como Tommy DeVito. Además de que nadie entendió por qué no se nominó a Robert De Niro ni a Ray Liotta, fue uno de los desaires más grande que la Academia le hizo a Martin Scorsese, sobre todo porque el premio a Mejor dirección terminó en las manos de Kevin Costner por Danza con lobos. Quizá el exceso de violencia y su fiel retrato a la mafia italo-americana, sumado a las ganas de la Academia de reivindicarse con los nativos americanos fueron la causa.
Si algo sabemos después de 90 años es que no siempre el favorito ni el que más lo merece es el que se lleva el Oscar