Moon (2009) y Source Code (2011) son indudablemente dos de las películas de ciencia ficción más espectaculares que hemos visto en los últimos diez años. Alabadas por la crítica y público, pusieron el nombre de Duncan Jones en el mapa y el joven director dejó de ser conocido únicamente como “el hijo de David Bowie” para convertirse en una promesa del cine.
Fue gracias a ese prestigio que Universal Pictures depositó en él uno de sus proyectos más largamente acariciados: la adaptación cinematográfica del videojuego Warcraft. Las expectativas no eran pocas, pues Warcraft, aparte de ser toda una marca en el mundo de los videojuegos, tenía legiones pidiendo su versión de cine y Jones parecía el candidato idóneo para ello. Sin embargo, como suele suceder con los complicados trasvases videojuego-cine, la cinta simplemente no cuajó del todo y terminó como un sonado fracaso de taquilla.
Pero vaya que el cine da revanchas. Y más cuando tienes el apoyo y libertad creativa que ofrece Netflix. Es así que este 23 de febrero podremos atestiguar el regreso de Jones con el estreno de Mute. Situada en 2052 en Berlín, la cinta nos presenta a Leo (Alexander Skarsgard), un bar tender mudo que emprende la búsqueda de una amiga y que conforme se adentra en los submundos de la ciudad conoce a un par de personajes con intenciones poco claras.
Skarsgard, quien acaba de ganar el Emmy y el Globo de Oro por su personaje en Big Little Lies, esta acompañado por Paul Rudd, al que próximamente veremos en Ant-Man and the Wasp, y Justin Theroux, marido de Jennifer Aniston, guionista de Iron Man 2 y el alguacil Kevin Garvey en The Leftovers.
Suficiente preámbulo, mejor chequen el trailer.