Su carita de niña que no rompe un plato, su voz angelical y sus papeles como la hija de Meryl Streep en ¡Mamma Mia! y como Cosette en Los miserables nos hacen difícil imaginarla capaz de mostrarse como Dios la trajo al mundo, y menos haciendo escenas de amor homosexuales, pero en 2013 Amanda interpretó a, nada más y nada menos, que a la estrella porno Linda Lovelace. Ha dicho, además, que para ella desnudarse frente a la cámara es liberador y que de veras no entiende por qué se censura.
Para ellas posar como Dios las trajo al mundo es una cuestión artística y un recurso para contar bien la historia, así que están dispuestas a cumplir con su labor