Cuando se anunció un spin off de The Big Bang Theory muchos fans tenían miedo de que no estuviera a la altura de la serie madre, pero Young Sheldon, que cuenta la infancia de Sheldon Cooper (Jim Parsons), es una propuesta acertada y diferente.
Para empezar, en cuestiones técnicas son completamente opuestas. Estamos acostumbrados a ver diferentes tiros de cámara, pero en esta serie la historia se cuenta a través de una.
Además, no utiliza audiencia dentro del estudio y es narrada en voz en off por el mismo Parsons. Estos pequeños detalles son en realidad una declaración por parte del equipo de producción que quiere demostrar que, aunque la historia se desarrolla en el mimo universo, este es un proyecto único.
“Fue la propuesta más rápida y la aprobación más rápida en la historia de la televisión”, dijo Leslie Moonves, el director ejecutivo de CBS.
La trama se concentra en la soledad que enfrenta un niño genio más que en la comedia geek a la que estamos acostumbrados, de hecho, las risas enlatadas no existen.
Este es un drama que se cuenta través de la comedia, es la historia de un niño que carece de habilidades para socializar y por lo mismo no encuentra su lugar en el mundo.
Aunque a veces es bastante notorio que los guionistas se esforzaron por encerrar al Sheldon adulto en el cuerpo de un niño de doce años, también vemos ciertos rasgos de su personalidad que nunca antes se habían expuesto como el autismo.
La premiere de la sitcom de Chuck Lorre y Steven Molaro para CBS atrajo 17.2 millones de televidentes y mantuvo el 98% de la audiencia de su serie madre.