Conforme pasan los años, cada vez es más frecuente recurrir a la inteligencia artificial para realizar algo. Mientras que su uso más popular entre las personas es para crear imágenes en las que se mezclan sagas, o se recrean ciertos estilos de animación como el de Studio Ghibli, plataformas como ChatGPT se han convertido en un auxiliar esencial para los usuarios de la tecnología.
Para miles de personas, ChatGPT es un asistente igual de funcional que Siri y Alexa, pues basta con escribirle cualquier duda que tengas, por mínima que sea, y te dará la solución a tu cuestionamiento en cuestión de unos cuantos segundos. Así de fácil es crear una imagen tuya al estilo de Studio Ghibli, que hasta la fecha han sido millones de fotografías, pero si se toma en cuenta no solo la producción de ellas, sino también el número de preguntas que se le realizan al día, entonces su consumo de energía aumenta exponencialmente.

El tema más discutido desde la semana pasada es la cantidad de agua que se ha invertido para la creación de imágenes con inteligencia artificial, pero la realidad es que el consumo de dicho recurso, así como de energía eléctrica, es aún mayor ante el sinfín de funciones que realiza el asistente virtual. De acuerdo con un estudio reciente de The Washington Post y la Universidad de California, generar un texto de 100 palabras provoca que ChatGPT consuma la misma electricidad que 14 bombillas LED prendidas por una hora.
Esa energía se traduce en 0.14 kilowatts por hora, por lo que si se multiplica dicha cifra con todas las funciones que realiza ChatGPT o Midjourney al día, Washington Post señala que dicha plataforma usa alrededor de 39.98 millones de kilowatts diariamente, que equivale a cargar ocho millones de teléfonos o encender el Empire State Building por 540 días. En una semana, ChatGPT consume 279.86 millones de kilowatts por hora, tomando en cuenta que la plataforma tiene 400 millones de usuarios activos semanalmente.

Retomando información de Business Energy UK, además del consumo eléctrico, ChatGPT usa 519 mililitros de agua para generar 100 palabras, por lo que su requerimiento de agua al día se estima en 39.16 millones de galones, que es suficiente para llenar 978 mil tinas para bañarse o bajarle a la taza de baño 24 millones de veces. El recurso es necesario para enfriar los servidores que hacen funcionar esta inteligencia artificial, así que el impacto ambiental es cada vez más creciente ante la alza de usuarios activos en estas plataformas.