Netflix está impactado a sus suscriptores con una miniserie llamada Adolescencia que, aunque no está basada en hechos reales, aborda un fenómeno preocupante en Gran Bretaña durante la última década. La serie concluye con un desgarrador episodio que deja una profunda reflexión sobre la familia, la violencia juvenil y la masculinidad moderna.
El episodio final cierra con una emotiva escena en la que Eddie Miller (Stephen Graham), devastado por la confesión de su hijo Jamie (Owen Cooper), abraza el osito de peluche de su hijo, pidiendo perdón como si hablara con él. Jamie, acusado del asesinato de su compañera Katie, decide cambiar su estrategia de defensa y declararse culpable, lo que sacude aún más a su familia.
Además, el director Philip Barantini describió este episodio como el "corazón" de la serie, ya que a lo largo de él, la familia Miller intenta celebrar el cumpleaños número 50 de Eddie, pero una serie de eventos -incluido el anuncio de Jamie sobre su declaración de culpabilidad- terminan por fragmentarlos aún más. Sin embargo, esta decisión podría, a largo plazo, volver a unirlos.

Desde el inicio, la serie busca manipular las percepciones del espectador. Según Stephen Graham, el casting de Jamie se realizó intencionalmente para que el público creyera en su inocencia. "Queríamos que la audiencia pensara: 'Es imposible que haya hecho esto'", explicó Graham. Sin embargo, la verdad se revela en los primeros minutos del episodio 1, cuando los detectives muestran un video de seguridad en el que Jamie apuñala a Katie siete veces. La revelación es impactante y cambia el rumbo de la historia.
Jack Thorne, coguionista de la serie, menciona que el enfoque de Adolescencia no es descubrir al culpable, sino entender el "por qué" de sus acciones. Se exploran factores como la baja autoestima, el acoso escolar y la influencia de la propaganda incel en línea, factores que llevaron a Jamie a cometer el crimen tras ser públicamente señalado en redes sociales.
El final de la serie se centra en la familia Miller y su reacción ante los hechos. Graham y Thorne querían alejarse de los estereotipos negativos sobre familias de jóvenes delincuentes. "Eddie no es un hombre violento. Es un padre trabajador que hace lo mejor que puede", señala Graham. La madre y la hermana de Jamie también son retratadas como personas honorables, demostrando que, a pesar de un entorno familiar estable, Jamie tomó un camino trágico.

Para Thorne, el cierre de la serie es una pieza clave para comprender a Jamie y la responsabilidad de su familia en su formación. "No se trata de culpar a los padres, sino de explorar qué enseñanzas faltaron en su crianza", explicó el guionista. Así es que si deseas volver a ver esta producción -o conocerla después de saber su trágico final- debes saber que los cuatro episodios de Adolescencia ya están disponibles en Netflix.