¿Te gustan las historias de crimen y los k-dramas? Entonces tal vez te suenen títulos como Somebody, Vincenzo o Mouse, pero hay un título igual de intrigante que probablemente has dejado pasar en este tiempo y ya es hora de que le des una oportunidad. Es una serie coreana de Disney+ en la que un abogado se ve envuelto en una terrible conspiración que lo envía a la cárcel y para sobrevivir en este terreno hostil deberá adoptar una personalidad vil con tal de sobrevivir.

Son 16 capítulos que siguen a Park Chang-ho (Lee Jong-suk de El amor es un capítulo aparte), un abogado de modesta condición que está investigando un caso de asesinato. En el mundo de los representantes legales es conocido como "Big Mouth" debido a su gradilocuente forma de hablar, peo pocos resultados a la hora de los veredictos.
Un buen día Chang-ho es acusado de ser el genio estafador "Big Mouse" por lo que es condenado a prisión. Una vez dentro, se enfrenta a una situación extrema donde su supervivencia depende de asumir o rechazar la identidad que le impusieron, esa es la trama de Big Mouth: Artista de la estafa.

Dentro de la cárcel Chang-ho debe volverse más astuto y malvado adoptando la personalidad de Big Mouse para ganarse el respeto de los demás reclusos y evitar ser eliminado por quienes lo ven como una amenaza. Mientras juega con la jerarquía tras las rejas intenta descubrir cómo fue incriminado y busca llegar al fondo de la conspiración en su contra.
Al mismo tiempo, su esposa Ko Mi-ho (Im Yoon-ah) fue quien le ayudó a Chan-ho a alcanzar su profesión y ahora incrédula de lo que sucedió, se propone limpiar el nombre de su marido haciendo su propia investigación fuera de la prisión.

Desde diferentes entornos ambos destaparán los oscuros secretos que ocultan las altas esferas y hará notar que no todo es como aparenta. Big Mouth: Artista de la estafa es un drama coreano lleno de corrupción, sociedades secretas y giros de tuerca intrigantes, elementos más llamativos de la historia que te cautivarán desde el primer episodio de la serie.