Con tantos millones que se invierten en películas como Duna: Parte dos, Sonic 3: La película, Mufasa: El rey león y Deadpool y Wolverine, es lógico que los estudios de cine hagan todo lo posible por acumular más y más en taquillas. Esto no sólo se limita a toda clase de productos que se lanza al mercado, sino que también aplica para estrategias de comercialización como adelantos inesperados y cameos de grandes estrellas de Hollywood.
Al respecto esta cultura del cine que se ha ido gestando con el paso de los años, la estrella de Star Trek, Chris Pine, ha adoptado una postura clara al respecto y exige lo que muchos fans sueñan. Fue en la "ACE Superhero Comic Con" de 2024 en Texas, que el también actor de Calabozos y dragones: Honor ente ladrones habló sobre la franquicia de ciencia ficción y las expectativas que los admiradores y los estudios tienen sobre la historia.
De acuerdo con el sitio de internet Popverse, el intérprete del Capitán Kirk de las películas de Star Trek de 2009 a 2016, también conocida como la línea de tiempo de Kelvin, ha adquirido sus propias experiencias con los fanáticos, el estudio y la franquicia. Si bien tuvo palabras amables para Trekkies, a los estudios no les fue tan bien. "Creo que deberíamos hacer películas que atraigan a la gente que quiera verlas. Estoy cansado de intentar complacer a la gente que no quiere ver lo que hacemos", dijo a todos los asistentes de la convención.
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Pine se refirió al hecho de que muchas películas intentan atraer a la mayor audiencia posible, pero a menudo descuidan a los fanáticos de verdad. Los amantes de Star Trek, en particular, anhelarían historias inteligentes que capturen el alma de la serie original. Si bien el espectáculo de explosiones y acción puede ser divertido, a menudo carece del intelecto que hizo de la franquicia Star Trek lo que es.
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En cambio, según Chris Pine, la atención no debería centrarse en grandes presupuestos para atraer aún más espectadores con aún más espectáculo, un fenómeno en el que los estudios han perdido de vista la calidad por la cantidad. "Estamos en un punto en el que puedes hacer una película por unos 500 millones de dólares. Para ser considerado un éxito y compensar a todos, tienes que hacer un trabajo extraordinario. Eso no parece tener mucho sentido para mí", dijo Pine sobre cómo las mejores historias no necesitan de un presupuesto colosal.
