Netflix tiene dentro de su catálogo un clásico de Mamoru Oshii, que con una duración de menor a 80 minutos, ofrece tanto un gran entretenimiento de alto nivel como también un viaje complejo y filosófico que ha inspirado grandes producciones como Matrix y Avatar.
Y como Ghost in the Shell no es solo para los fanáticos del anime o la ciencia ficción, sino también para cualquier amante del cine que desee entender el impacto de esta obra en la cultura pop, debes saber que esta película combina acción, una narrativa compleja y un profundo cuestionamiento filosófico sobre la naturaleza de la identidad y la conciencia. Además, sus ricos detalles requieren múltiples visionados para capturar la magnitud de sus ideas.
Por lo tanto, si alguna vez has sentido una brecha en tus conocimientos cinematográficos, esta es tu oportunidad para cerrarla. No en vano, Ghost in the Shell aparece en numerosas listas de las mejores películas de ciencia ficción y producciones animadas de todos los tiempos.
Situada en 2029, su historia nos lleva a un mundo donde es común reemplazar partes del cuerpo con componentes artificiales. Este avance permite a los humanos trascender limitaciones físicas y mentales, aunque también plantea riesgos sumamente peligrosos. En medio de todo esto, la mayor Motoko Kusanagi, una agente de la Sección 9 del servicio secreto japonés, se enfrenta al "Titiritero", un hacker que puede invadir la mente humana y desencadenar una trama llena de acción y cuestionamientos sobre qué define la identidad.
Y como la influencia de Ghost in the Shell es incuestionable, este estudio filosófico sobre la inteligencia artificial y la transferencia de la mente humana abrió camino para películas como I, Robot protagonizada por Will Smith, AI: Artificial Intelligence de Steven Spielberg, y la épica Avatar de James Cameron. Sin embargo, probablemente su mayor impacto se refleja en la saga de Matrix donde Lilly y Lana Wachowski mostraron el anime al productor Joel Silver con la declaración: “¡Queremos hacer esto en la vida real!”, y lo lograron al entregar otro clásico atemporal.
Aunque el remake de acción real protagonizado por Scarlett Johansson ofrece un vistazo al universo de Ghost in the Shell, este no alcanza a abordar la profundidad y complejidad de su antecesora animada. Actualmente, la versión de Johansson está disponible solo como vídeo bajo demanda, pero la versión animada es, sin duda, la experiencia definitiva para iniciarse en este universo.
Incluso si nunca has visto Ghost in the Shell, seguramente reconocerás algunos de sus elementos visuales o temáticos, ya que su influencia se encuentra esparcida a lo largo de múltiples películas y series. Así que, si buscas una película que no solo te entretenga, sino que también expanda tu perspectiva sobre la identidad y la tecnología, Ghost in the Shell es imprescindible para ti. Por lo tanto ve a Netflix y prepárate para un viaje intelectual y visual como pocos.