John Wayne, una de las figuras más icónicas del cine western, se consolidó como una leyenda en el género con títulos como Más corazon que odio, Río Rojo y El dorado. Su estilo inconfundible y su presencia imponente en la pantalla lo llevaron a ser considerado uno de los grandes del cine estadounidense, aunque su calidad actoral, en ocasiones, pasaba a segundo plano ante la imagen de tipo duro que proyectaba.
A lo largo de su carrera, Wayne se hizo merecedor de un Premio de la Academia por su actuación en Cahill U.S. Marshal y acumuló nominaciones por su trabajo en Arenas sangrientas y su labor como productor en El Álamo. Estas distinciones reflejan su dominio del oficio, y su conocimiento de la industria cinematográfica era tan vasto que no dudaba en expresar sus opiniones sobre el talento y el cine de su época.
Así fue como John Wayne llegó a admirar a este actor por encima de otras leyendas
Contrario a su fama de hombre rudo, John Wayne no se caracterizaba por hacer críticas severas hacia otros actores. Aunque era exigente con la calidad de las películas, tenía una tendencia a reconocer y elogiar el trabajo de sus colegas cuando consideraba que lo merecían. Wayne reservaba sus elogios para aquellos intérpretes que realmente lo impresionaban y no dudaba en reconocer el talento ajeno.
Uno de los actores que más admiración generó en Wayne fue James Garner. Reconocido por su versatilidad, Garner saltó a la fama con series como Maverick y The Rockford Files, en las que demostró una habilidad natural para interpretar personajes en roles de aventura, comedia y drama. Esa misma habilidad lo llevó a la pantalla grande, donde continuó forjando una sólida carrera.
Entre las películas más destacadas de Garner figuran Infierno bajo el agua, Victor o Victoria? y Grand Prix, producciones que mostraron su capacidad para abordar distintos géneros con una facilidad que pocos actores lograban. La versatilidad de Garner cautivó a Wayne, quien en la biografía John Wayne: The Life and Legend, de Scott Eyman, destacó el trabajo de Garner con palabras muy elogiosas.
“Puede hacer de todo: comedia, crimen…”, expresó Wayne en dicha biografía. “Sus expresiones faciales por sí solas son suficientes para hacerte reír. La gente habla maravillas de Marlon Brando y Randolph Scott, pero no se pueden comparar con él. Creo que el mejor actor del mundo en este momento es James Garner”. A pesar de la gran admiración que Wayne sentía por Garner, su respeto y reconocimiento hacia él se dio a la distancia, ya que ambas estrellas nunca compartieron pantalla.