Cuando uno debuta como director con la adaptación de una de las novelas más trascendentes de la literatura mexicana como Pedro Páramo, se necesita el consejo de las personas que más amas. Y justamente eso fue lo que hizo Rodrigo Prieto, reconocido cineasta mexicano detrás de la fotografía de joyas cinematográficas como El lobo de Wall Street o El Irlandés, quien no dudó en acercarse a su gente más cercana para pedirles consejo en la etapa de edición de esta, su ópera prima.
“Recurrí a la gente en quien confío para la toma de decisiones importantes. Especialmente me interesaba el punto de vista de quienes no conocen la novela o la historia de nuestro país”, dijo Prieto en entrevista con Sensacine Latam.
El mexicano, quien también tiene una carrera prodigiosa en la historia de la música por haber trabajado con estrellas de la talla de Taylor Swift, Lana del Rey o Beyoncé, aseguró que uno de los inputs más importantes fue el de Rodrigo García, hijo del escritor Gabriel García Marquez, quien le aseguró siempre tenerle miedo a las adaptaciones cinematográficas de grandes obras literarias
“Rodrigo García, cuando vio la película me dijo que esto le comprobaba que sí se podían hacer adaptaciones de grandes libros. Me dijo: 'me daba miedo verla por si no me gusta'”, añadió Prieto.
Me dio mucha esperanza que el hijo de Gabriel García Marquéz estuviera contento con el resultado
Pero más allá de un foro en donde sus más allegados aprobaran o no su ópera prima, el proceso de edición se convirtió en un espacio de comentarios que nutrieron el producto final que se proyectó en el Festival Internacional de Cine de Morelia: “Él [Rodrigo García] me dijo que perdíamos mucho a Juan Preciado, entonces metí más textos de Juan Preciado”.
Ahora bien, el espacio de comentarios se extendió a otras leyendas como Alejandro Gónzalez Iñártu y Martin Scorsese, siendo este último quien le dio el consejo de alargar un par de de planos secuencias: “Recurrí a mis amigos cineastas y directores, como Martin Scorsese y a su hija Francesca. También a Greta Gerwig, Alejandro Gonzales Iñárritu y a su esposa María Eladia”.
“En la etapa de edición, especialmente, mostré la película a amigos y familia. Pero mi esposa y mis hijas fueron cruciales en la toma de decisiones muy importantes. También recurrí a mis amigos como Martin Scorsese y a su hija Francesca porque son cinéfilos como nadie más. Tienen la capacidad de leer subtítulos sin entender todo lo que está pasando. Los dos entendieron muy bien la historia, entendieron los personajes y lo que estaba pasando”.
“Era divertido que Scorsese me preguntara por ciertos personajes como Susana. Pero él solo me sugirió hacer dos planos más largos y así fue", aseguró el cineasta.