Hay diversos cineastas que son considerados como puristas por su manera de hacer cine y Quentin Tarantino es uno de ellos. Reconocido principalmente por ser el autor de Pulp Fiction y Perros de reserva, el director estadounidense fue uno de los realizadores que sobresalieron durante la década de los 90 y más tarde se convirtieron en grandes nombres dentro de Hollywood y el cine internacional.
Nominado al Oscar por películas como Django sin cadenas y Los 8 más odiados, Tarantino es uno de los directores cuyas obras han triunfado en las ceremonias de La Academia de una manera u otra, pero ganar una estatuilla de dicho tipo no debería ser tan sencillo… o al menos eso es lo que él asegura cuando se trata de estas producciones cinematográficas, cuyo género es explotado en la industria.
Si bien él ha utilizado hechos verídicos para contextualizar tramas de Bastardos sin gloria y Había una vez en Hollywood, Quentin Tarantino jamás ha llevado a la pantalla grande la vida de una persona real. Sharon Tate (Margot Robbie), por ejemplo, únicamente fungió como un personaje secundario cuyo destino cambió gracias a la intervención de los protagonistas: Rick Dalton (Leonardo DiCaprio) y Cliff Booth (Brad Pitt); sin embargo, él tiene un problema cuando un largometraje se dedica a contar de inicio a fin la biografía de una persona famosa.
Vanity Fair
Las biopics como Oppenheimer, Las horas más oscuras y Elvis son un cebo para que La Academia les otorgue una estatuilla, de acuerdo con Tarantino, pero eso no disminuye el hecho de que son producciones que atraen bastante la atención de la gente, y la prueba más reciente es el lanzamiento de Back to Black. Retomando su conversación con el crítico Roger Ebert, “Un género que no respeto es el biopic. Son simplemente grandes excusas para que los actores ganen premios Oscar”.
20th Century Studios
Triunfos como el de Cillian Murphy y Rami Malek afirman su hipótesis, pues ambos actores ganaron el anhelado premio de Hollywood tras interpretar a J. Robert Oppenheimer y Freddie Mercury, respectivamente. “Incluso si cuentas la vida de la persona más interesante de principio a fin, terminarás con una película muy aburrida. Si vas a hacer eso, entonces tienes que hacer una edición cómica de su vida”, reveló. ¿Estás de acuerdo? Mientras tanto, las audiencias esperan con ansias la interpretación de Timothée Chalamet como Bob Dylan en Un completo desconocido.
