Desde 1970, muchos estudios se interesaron por llevar a la pantalla grande la adaptación de la novela corta "Podemos recordarlo por usted al por mayor" de Phillip K. Dick, una de las obras más alabadas de la ciencia ficción. El proyecto parecía muy ambicioso por lo que cayó en manos de diferentes cineastas, hasta que Paul Verhoeven, director de RoboCop, Bajos instintos y Benedetta, decidió hacerlo realidad gracias a la intervención de Arnold Schwarzenegger.
En cuanto el actor de Terminator tuvo el guion en sus manos, no dudó en producir la película y estaba convencido de que Verhoeven era el indicado para dirigirla. Curiosamente el cineasta siempre soñó con trabajar con la estrella de acción, por lo que aceptó de inmediato sin saber que sería una de sus películas más alabadas por la crítica y el público, incluso habiendo obtenido el Oscar a los Mejores efectos visuales.
Por supuesto que hablamos de El vengador del futuro, un clásico absoluto de la década de los 90s. La cinta nos traslada al año 2084, donde conocemos a Douglas Quaid (Schwarzenegger), un constructor que tiene pesadillas recurrentes relacionadas con un viaje a Marte. Su temor lo lleva a Rekall Inc., una empresa que realiza implantes de memoria que le permite a los clientes experimentar la sensación de un fin de semana de ensueño. Douglas planea utilizar esta tecnología para emprender un viaje al planeta rojo, pero las cosas se complican.
El protagonista comienza a sufrir episodios de amnesia y es perseguido por un peligroso grupo de asesinos, entre ellos, su esposa, Lori (Sharon Stone). La película recaudó 260 millones de dólares a nivel global, un éxito total para Carolco Pictures, productora detrás de la trilogía Rambo.
El vengador del futuro, a pesar de tener un guion sencillo, fue elogiada por sus efectos muy avanzados para la época, además de su nivel de violencia. El éxito fue tal, que en 2012 se lanzó una nueva versión con el mismo nombre protagonizada por Colin Farrell, Kate Beckinsale y Jessica Biel, pero resultó un gran fracaso.