Vivimos tiempos extraños. Desde que aconteció la pandemia, el mundo nunca volvió a ser el mismo. Como si de una película de ciencia ficción se tratara, al más puro estilo de 28 Days Later o Guerra Mundial Z, la humanidad cambió para siempre a partir de 2020, y por ende, nuestros hábitos y nuestro estado de ánimo también se vio modificado.
Las principales personas que se vieron afectadas por estos cambios fueron todas aquellas nacidas a finales de los años 90s y principios de los 2000s, es decir, la Generación Z. Esto es algo que se ve reflejado en múltiples aspectos, entre ellos, la música. De acuerdo con un reporte reciente, publicado por Spotify, fue revelado que la Generación Z prefiere escuchar música triste más que cualquier otro grupo etario.
Debido a ello, el popular servicio de música por streaming suele ofrecer una meticulosa selección de canciones melancólicas para el grupo demográfico que abarca entre los 11 y 26 años, aproximadamente. Por supuesto que esto no es una regla universal y claro que hay varias excepciones, pero por lo general, este sector de la población suele disfrutar de la música de Lana Del Rey, Billie Eilish y Frank Ocean, entre otros.
De acuerdo con el blog oficial de Spotify, "triste" es el término más buscado en los servidores de la plataforma, por usuarios de la Generación Z. “Ellos aceptan sus sentimientos y están cambiando el estigma de la vulnerabilidad. La Generación Z en Spotify trae una realidad cruda y auténtica al expresar sus emociones. Lo estamos comprobando en sus escuchas y queríamos celebrar eso tan poderoso que están haciendo”, expresó Krista Scozzari, directora de marketing de la compañía para Norteamérica.
Algunos otros artistas que estos jóvenes suelen escuchar con frecuencia son: Phoebe Bridgers, Olivia Rodrigo, Arctic Monkeys, Zach Bryan, Coldplay, Lewis Capaldi y Radiohead, con base en los reportes oficiales difundidos por Spotify. De acuerdo con diversas personas entrevistadas, pertenecientes a la Generación Z, ellos buscan canciones que les ayuden a “normalizar sus sentimientos y su humanidad”.