En La trampa, la más reciente película M. Night Shyamalan que llega a Cinépolis y Cinemex este jueves 8 de agosto, todos en una gran ciudad están frenéticos. ¿Por qué? Porque están listos para ver un concierto de la famosa estrella del pop Lady Raven (Saleka Shyamalan). Dos de sus fans, un hombre llamado Cooper (Josh Hartnett) y su hija Riley (Ariel Donoghue), asisten al concierto con gran entusiasmo, pero las cosas comienzan a cambiar lentamente.
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Entre los gritos de adoración y los aplausos, el concierto tiene un objetivo oculto: una fachada para capturar a un infame asesino en serie conocido como El Carnicero. Con cámaras de seguridad instaladas, ejércitos de policías con armas listas y vehículos policiales rodeando el lugar, esperan detener al astuto criminal.
Josh Hartnett comentó que, después de asistir a The Eras Tour de Taylor Swift con sus hijas, se dio cuenta de que la audiencia retratada en la película no era en realidad “exagerada”. El actor, quien el año pasado participó en la aclamada Oppenheimer de Christopher Nolan, admitió que al principio no comprendía completamente lo transformador que puede ser para los fans asistir a conciertos de sus artistas favoritos.
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La experiencia de Josh Hartnett en el Eras Tour que cambió su visión sobre ‘La trampa’
Esto lo llevó a cuestionar cómo se representaba al público en el nuevo y escalofriante thriller de Shyamalan. “Las llevé al Eras Tour hace unas semanas en Londres para ver a Taylor Swift, y fue lo primero que realmente les interesaba ver” dijo Hartnett recientemente a Associated Press.
“Lo sorprendente fue que le envié una foto a Shyamalan básicamente diciendo que esto es la vida imitando al arte. Porque cuando filmamos la película, sentí que su caracterización del público me parecía exagerada, como alguien que no había estado en un concierto pop con sus hijos aún”, señaló el también actor de La dalia negra y 30 días de noche.
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Hartnett recordó incluso haber pensado durante el rodaje de las escenas de concierto: “Pensaba, estos chicos están demasiado entusiasmados, la gente no es así en los conciertos. Recuerdo que en los conciertos la gente era demasiado cool para realmente hacer algo. Ahora las cosas son diferentes... Los chicos están rabiosos por los artistas que aman hoy en día”. No obstante, su perspectiva cambió una vez que asistió a la gira más grande de la superestrella global, y fue entonces cuando entendió que el aclamado director de El sexto sentido y Señales estaba en lo correcto con su representación del ambiente de los conciertos.
