Fue en marzo de 2024 cuando Dune: Parte 2 llegó a cines de todo el mundo y conquistó a las audiencias con la continuación de la historia escrita por Frank Herbert en 1968. Con Timothée Chalamet y Zendaya de vuelta en los roles protagónicos, Denis VIlleneuve terminó de contar la llegada del Lisan Al Gaib entre los Fremen y mostró a los fanáticos de lo sci-fi y la acción lo que se podía lograr en cuanto a un espectáculo de gran escala.
Aunque muchos esperaban los lanzamientos de películas como Un lugar en silencio: Día uno y Megalópolis, algunos podrían asegurar que Dune: Parte 2 se ganó el título de la cinta de ciencia ficción más esperada del año; sin embargo, nadie se esperaba que otra producción del mismo género sorprendiera a los espectadores al otro lado del mundo.
El cine indio ha ganado más relevancia en Occidente conforme pasan los años, así que tras la popularidad que RRR consiguió no sólo entre las audiencias sino también en los premios Oscar, el público cada vez muestra mayor interés por estas producciones de dicha nación. Titulado Kalki 2898 AD, este nuevo largometraje ya superó incluso a la cinta hindi más aclamada del 2023.
Descrita como una mezcla entre Dune y Star Wars, las cuales ya sabemos que no existirían la una sin la otra, Kalki 2898 AD narra la historia de un avatar moderno del dios hindú Vishnu, que descendió a la Tierra para proteger al mundo de fuerzas malignas. A tan solo un par de semanas de su lanzamiento en India, la película ya está rompiendo récords en su país de producción.
Luego de alcanzar una calificación de 81 por ciento en Rotten Tomatoes, el proyecto dirigido por Nag Ashwin recaudó 66 millones de dólares durante sus primeros días en salas de cine, incluso más de lo que ganó Jawan en 2023. Lo más impresionante de todo es que también se coronó como la producción más cara en la historia de India al contar con un presupuesto de 72 millones de dólares, mismo que el cineasta justificó con su elenco lleno de estrellas pensado para encandilar a las audiencias internacionales.