¿Sigues temblando cada vez que recuerdas la pelea entre Meleys, Sunfyre y Vhagar? Nos pasa exactamente lo mismo, por mucho uno de los episodios más épicos y dramáticos en el universo de House of the Dragon.
Además fuimos testigos de la muerte de Rhaenys (Eve Best), no sin antes demostrar al mundo entero por qué era una de las jinetes de dragones más experimentados y feroces en la historia de Westeros. Sin embargo, el poder del gigantesco Vhagar y la crueldad de Aemond (Ewan Mitchell) terminaron con su vida.
Y como podrás imaginarlo: filmar un episodio con tantos giros de tuerca, actuaciones dramáticas y obvio, sangre, colmillos y fuego de dragón no fue cosa sencilla, pues la batalla de Rook's Rest requirió el doble de esfuerzo en comparación con el resto de los episodios de la segunda temporada de House of the Dragon; esto se traduce en 40 días de rodaje, 250 extras y una locación legendaria en la historia del cine.
La productora ejecutiva Melissa Bernstein reveló que el cuarto episodio resume la esencia de House of the Dragon. "Es enorme desde el punto de vista de los efectos visuales, los efectos especiales y las acrobacias, con una enorme batalla en tierra y los dragones en el cielo, pero también narrativamente porque ninguno de los personajes principales tiene toda la información", compartió en conversación con Max.
Los dragones son el equivalente de las armas nucleares y una vez que se desatan, no hay vuelta atrás.
La exigencia detrás del episodio requirió que el creador de esta adaptación, Ryan Condal en conjunto con el director y productor ejecutivo, Alan Taylor, trabajaran meses para cuidar hasta el más meticuloso detalle desde el vuelo de los dragones, las batallas en tierra y coreografías con caballos y soldados armados.
"La batalla de Rook's Rest requirió seis meses de planificación. Lo llamamos previsualización, en la que hacemos una animación en bruto, un storyboard, de cómo serán los fotogramas finales, y lo refinamos constantemente, asegurándonos de que los tiempos estaban claros, porque es una historia de reveses", dijo el realizador.
Y esto no fuera suficiente, la épica batalla se filmó en una locación marcada con letras de oro para el cine, se trata de las colinas de Bourne Wood, un sitio icónico en Reino Unidos, pues fue el mismito escenario de la famosa secuencia inicial de Gladiador de Ridley Scott. "Rodamos justo en la colina donde los romanos salían corriendo al encuentro de las hordas germánicas en la película de Ridley", explica Condal.
Y no debemos olvidar que los actores logran profundizar tanto en la historia que puden crear vínculos especiales con algunos personajes, esto mismo le sucedió a Tom Glynn-Carney, quien interpreta al rey Aegon II.
Aunque la mayoría de sus escenas sobre Sunfyre se filmaron en un set cerrado mientras montana una base en movimiento conocida como "buck" o "bucking bronco", mismo que simulaba los movimientos del dragón en plena batalla, no pudo ser ajeno al sentimiento por la muerte de Rhaenys.
"Recuerdo que mi último día de rodaje fue muy intenso y sí, me sentí triste, y se me salieron las lágrimas al final porque estaba muy triste por despedirme de Rhaenys, despedirme de ese maravilloso personaje, y de esta fantástica serie, así que fue muy emotivo".
No olvides que los primeros cuatro episodios de House of the Dragon se encuentran disponibles en el catálogo de Max y los episodios estreno llegan todos los domingos en punto de las 7 p.m. hasta el próximo 4 de agosto, fecha en la que terminará la segunda y épica temporada.