La saga de James Bond no sólo es una de las más exitosas en toda la historia del séptimo arte, sino que también es una de las más longevas, superando por ejemplo a la franquicia de Star Wars. Con más de seis décadas de duración y dos docenas de películas estrenadas, el legado del Agente 007 es uno que se sigue manteniendo más que vigente hasta nuestros días.
La encarnación más reciente de James Bond ha sido interpretada por Daniel Craig, quien desde el año 2006 se ha encargado de dar vida al icónico personaje. Casino Royale, Quantum of Solace, Skyfall, Spectre y No Time To Die han sido las cinco cintas en las que hemos podido ver al actor de 56 años de edad ponerse bajo la piel del agente más famoso del mundo, sin embargo, en esta ocasión nos estaremos enfocando en un dato curioso que sucedió en Skyfall.
TV Insider
Estrenada en el año 2012 y contando con un presupuesto de 200 millones de dólares, Skyfall llegó a los cines bajo la dirección de Sam Mendes. En este filme vemos cómo la lealtad de James Bond, el mejor agente de los servicios británicos, hacia su superiora M se ve puesta a prueba cuando el pasado de ella vuelva para atormentarla. El agente 007 deberá localizar y eliminar la amenaza que representa el villano Silva y, para ello, contará con la ayuda de la agente Eve.
Bond, quien siempre se ha caracterizado por tener un porte de lo más pulcro y elegante, usualmente visto bebiendo martinis, tuvo que abandonar su clásica bebida en Skyfall por un acuerdo millonario. Y es que resulta que para esta película la marca de cerveza Heineken hizo hasta lo imposible para que su producto apareciera a cuadro, específicamente en las manos de Daniel Craig. A cambio, la cervecera ofrecía 45 millones de dólares (que eventualmente servirían para cubrir parte del presupuesto).
En un acuerdo publicitario sin precedentes Metro-Goldwyn-Mayer aceptó el trato, mostrando a James Bond bebiendo una cerveza Heineken por primera vez en la historia. La escena en cuestión dura apenas 18 segundos, y de hecho el actor británico incluso tapa un poco con su mano la marca, pero sea como sea Heineken logró su cometido de aparecer en una película tan importante como Skyfall, convirtiéndose así esa cerveza en particular en la bebida más cara de todos los tiempos.
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